Nos da la impresión de que lo que están matando , atracando y
robando en están siendo dirigidos por lo que hace poco tiempo estaban
dirigiendo el anarquismo – terrorismo en toda la República Dominicana , con la particularidad,
de que aquella vez no mataban, ni robaban, ni atracaban.
El plan que ahora
están llevando a la práctica, es el de la acción rápida , probando la habilidad
y agilidad de los entrenados, este plan es de abierta provocación a las autoridades, para llevar al gobierno a
la represión y con la acción represiva del gobierno, ellos
con propaganda bien dirigida en los medios de comunicación, pasar de victimarios a víctimas y si no se actúa
rápidamente con coraje e inteligencia, se acabarán las palabras paz y
tranquilidad en la República Dominicana, diremos que hay que actuar con mucha sigilidad, pues
hay que obviar un poco las normas y derechos de imposición foráneas, para salvar
la patria., ahora bien, admítase aunque sea irónicamente , que no se ha hecho
lo que debió y se debe hacer.
Porque a decir verdad,
hay que remenear la mata, de arriba abajo, pues creemos que es la forma o
manera de neutralizar al adversario, que es fuerte y poderoso y con aliados
foráneos, también fuertes y poderosos y ahora mismo están confabulados con dos
frentes visibles, la regularización de los haitianos y la revolución sin nombre,
la que al parecer será terrorismo.
Ahora bien, nosotros no somos, ni periodista, ni sabio, ni
nada, solo somos producto de la sapiencia y como tales, actuamos y observamos, que las dos cosas son malas y
también vemos, que el capitalismo y el
terrorismo, son como los que fundaron a Roma y que según la leyenda se
llamaban Reno y Rómulo y que Rómulo mató a Reno y se quedó con Roma, con la
diferencia de que en el caso del capitalismo y el terrorismo, el uno no ha
podido matar al otro todavía. Tampoco saben que de esa lucha salvaje entre ellos,
saldrá, o nacerá, para bien del mundo, la verdad verdadera.
Por otra parte diremos, que somos latinoamericanos, del
continente donde se ejerce con más violencia la hegemonía del capitalismo salvaje ,disociador, chismoso hasta el
extremo, que lleva a los pueblos, naciones, a pelear entre si y los manipulas
con intrigas inquinosas, utilizando su poder de decisión en los organismo
títeres, como el caso nuestro con Haití .
Hay que sentarse a pensar mucho rato, aunque sea del 90 al 2000 y del 2000 al 2006, y de ahí en adelante,
pues no se puede opacar la historia, porque nos traicionamos a nosotros mismos…
Continuará.
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